Se pasó la Navidad, pero no los motivos para festejar. Antes de darnos cuenta, y con los últimos coletazos de turrón rodando por casa, llega San Valentín para recordarnos que el amor es el motivo de celebración más importante que existe.

Sentirse querido, amado y acompañado en todo momento. Ya sea el amor a tu pareja, que es el motivo principal de esta fecha también conocida como ‘El día de los Enamorados’; o incluso el amor por tu familia, por tu mascota o por tus amigos. Porque estar soltero o soltera no nos tiene que privar de sentirnos partícipe de este día. Sobre todo porque estar sin pareja no es sinónimo de estar solo o sola. 

 

Vino Rosado

Y para celebrar, nada mejor que un Barcolobo. En esta ocasión, optaremos por nuestro Lacrimae Rerum. Este vino rosado, tempranillo 100%, se produce en la Reserva Natural “Riberas de Castronuño – Vega del Duero” con una crianza de 12 meses en barricas de roble francés. Y por tanto, es ideal para San Valentín, no solo por su tono rosa, que es el color asociado a este día, sino por sus matices. 

Con notas a fruta madura, donde evidentemente resalta la fresa, esta bebida de apariencia brillante y vibrante, sorprende con toques de plátano en nariz. En boca es untuoso y redondo, con una acidez equilibrada y un final largo y persistente con chispa. 

Porque si hay algo característico de esta fecha es la chispa, esa magia que la gente busca para seguir sorprendiendo a su pareja año tras año. Pero como hemos dicho antes, no importa el qué, sino con quién. 

Estando con la gente que uno quiere, y con una buena copa de vino Lacrimae Rerum, sobran los regalos y sobra todo. ¡Todo menos la cena! Este vino se puede maridar perfectamente con una cena romántica de sushi o quesos curados. También es una excelente opción para acompañar un postre de vainilla, o una tarta donde destacan los sabores afrutados.

Celebra San Valentín con quien quieras, y con Barcolobo. ¡Por tí, y por el amor! No dudes en probarlo y disfrutar de una velada inolvidable en buena compañía.